ESTACIÓN J. J. ALMEYRA
* Nadie más veía al gato negro que estaba sentado en mitad del vagón lavándose la cara? Una niña que llevaba trenzas sujetas con cintas azules y que jugaba con una muñeca iba sentada justo al lado del felino pero no reparaba en él. Puede que no le gustasen los gatos. O es que el gato no pertenecía a este mundo sino a otro de los mundos posibles. La cartografía es un fraude. La realidad no es solo lo que acontece ante tus ojos sino, y principalmente, aquello que tus ojos no pueden percibir. Un trueno grave hizo temblar las ventanillas del vagón, varias personas sacaron sus cabezas de sus caparazones y miraron en torno como buscando recibir un comentario. Un hombre mayor dijo algo como qué lo parió che, enunciado que fue apoyado por varias inclinaciones de mentón. Yo mismo cerré involuntariamente Matadero 5 exaltado por el ruido del trueno. Y el gato inmutable. Como si el trueno no hubiera caído para él o como si supiera que el trueno caería exactamente en...